Pizza casera de champiñones, aceitunas y tomates

En primer lugar, prepararemos la masa. Ponemos la harina tamizada y la sal en un bol. Removemos bien para que se integren los dos ingredientes.

A continuación, añadimos el agua y la cucharadita de aceite suave. Lo haremos poco a poco para utilizar la cantidad necesaria para la formación de una masa manejable, consistente y que no se pegue en las manos.

Amasamos hasta obtener una masa para pizza. Hacemos un hueco en el centro y añadimos la levadura y un chorrito de agua mezclando sin llegar a integrarla. Cuando ya esté activa, amasaremos de nuevo el conjunto hasta mezclar los ingredientes por completo.

Ponemos la masa para pizza en un bol y la dejamos fermentar durante 45 minutos.

Pasado el tiempo de fermentación, hacemos la bola de masa y extendemos con un rodillo. Colocamos la base en una bandeja de horno enharinada y cocinamos a 170º durante unos minutos, sin que llegue a dorarse.

En una sartén salteamos la cebolla y los champiñones y cocinamos hasta que se doren a fuego lento. Sazonamos.

Retiramos la masa del horno, y la cubrimos con la salsa de tomate. Espolvoreamos el queso, incorporamos las tiras de bacon, la cebolla con los champiñones, las aceitunas verdes y los tomates cherry cortados a la mitad.

Llevamos de nuevo al horno unos minutos para que se caliente todo y servimos decorando con unas hojas de albahaca.